Obra:
Conjunto de trece obras (Siglo XVI) representando los misterios del Rosario en soporte mural, pintura al fresco. Las pinturas murales son atribuidas al Circulo de Paolo de San Leocadio.
Piezas de azulejería (Siglo XIX) realizadas con un bajo relieve recubriendo todo el techo de la estancia. Los bajo relieves representan cabezas de querubines y están decorados con la técnica del reflejo metálico con retoques en azul cobalto.
Se restauraron también los apliques metálicos, material pétreo, altar de mármol y pavimento de madera.
